Pedro Urruchurtu, dirigente político y activista, denunció públicamente que Hidrocapital, empresa estatal encargada del suministro de agua en Venezuela, habría acudido a la residencia de la Embajada Argentina en Caracas para cortar el servicio de agua por tubería. Según Urruchurtu, la acción también se suma al impedimento de ingreso de agua potable a través de camiones cisterna, dejando a la sede diplomática en una situación crítica.
En su declaración, Urruchurtu destacó que el personal de Hidrocapital espera una “autorización” para proceder con el corte definitivo del suministro. Sin embargo, esto ha generado preguntas sobre el trasfondo de la medida. ¿Es una simple acción administrativa o hay un componente político detrás?
El impedimento para que el agua en cisternas llegue a la embajada podría ser interpretado como un acto de presión política.
3eravoz @soyjosecorrea
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