Elon Musk, el multimillonario dueño de empresas como Tesla, SpaceX y X, ha adquirido un complejo de mansiones en Texas, destinado a alojar a sus once hijos y a otros futuros herederos, según un informe de The New York Times. Esta medida responde a la intención de Musk de mantener a su familia unida, permitiendo que sus hijos compartan tiempo entre hermanos en un entorno común.
El diario destaca que, mientras Musk reside temporalmente en Pensilvania, apoyando la candidatura de Donald Trump en las próximas elecciones, la madre de dos de sus hijos, Shivon Zilis, ejecutiva de Neuralink, ya se ha mudado al complejo. Por otro lado, Claire Boucher, conocida como Grimes, y madre de otros tres hijos de Musk, permanece en disputa legal con él por la custodia, sin planes de mudanza hasta el momento.
En esta residencia compartida, Musk aspira a programar tiempo de calidad con sus hijos, un proyecto que parece seguir su preocupación por el descenso de la natalidad mundial. El empresario ha expresado en múltiples ocasiones su creencia de que la baja tasa de nacimientos representa una amenaza para el futuro de la humanidad. Musk ha promovido la paternidad entre amigos y conocidos, llegando incluso a ofrecer su esperma a personas de su entorno, entre ellas la abogada Nicole Shanahan, candidata independiente a la vicepresidencia de Estados Unidos, oferta que fue rechazada.
Musk, además, ha donado 10 millones de dólares a la Universidad de Texas para investigar la caída en las tasas de fertilidad. Según la biografía del magnate publicada en 2023, la preocupación por la falta de hijos entre personas de alta capacidad intelectual lo ha llevado a alentar la paternidad a través de sus redes, sugiriendo que tener hijos “debería ser una prioridad nacional”.
3eravoz @soyjosecorrea
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