El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sostuvo este viernes una reunión con Gianluca Rampolla, coordinador residente y humanitario de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en el país, para presentar lo que calificó como “pruebas” de una presunta conspiración gestada desde Estados Unidos en contra de su gobierno. El encuentro fue transmitido por el canal estatal VTV, que aseguró que dichas pruebas fueron entregadas como parte de un esfuerzo por exponer un plan de agresión internacional hacia Venezuela.
Según Maduro, este complot desde Washington tiene como objetivo generar violencia y ataques terroristas en territorio venezolano, y mencionó que ya había informado de esta situación al secretario general de la ONU, António Guterres, durante una conversación telefónica previa. El mandatario explicó que durante el encuentro con Rampolla cumplió con su compromiso de proporcionar detalles más específicos sobre la supuesta conspiración.
Maduro también denunció que su gobierno enfrenta “agresiones externas” desde las elecciones del 28 de julio, comicios en los que fue declarado ganador pero que han sido cuestionados tanto dentro como fuera de Venezuela, especialmente por la oposición, que ha denunciado un presunto fraude electoral.
El presidente venezolano señaló que esta conspiración incluye la contratación de mercenarios para invadir el país y posibles intentos de magnicidio, además de una campaña de recolección de fondos en redes sociales para promover ataques contra la institucionalidad. Entre los promotores de esta campaña mencionó al empresario militar estadounidense Erik Prince, quien ha estado impulsando una iniciativa que busca reunir 10 millones de dólares para “restaurar la democracia” en Venezuela, de los cuales ya ha recaudado más de un millón en los últimos días.
3eravoz @soyjosecorrea
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