El presidente Nicolás Maduro convocó una reunión del Consejo de Defensa de la Nación y el Consejo de Estado para abordar la situación del país tras las protestas que estallaron después de las elecciones del 28 de julio. Durante este encuentro, el fiscal Tarek William Saab presentó un informe sobre los daños y crímenes ocurridos durante las manifestaciones de los días 29 y 30 de julio.
Maduro exigió una respuesta contundente, pidiendo “máxima severidad” y una “mano de hierro” contra los delitos de odio. Afirmó que figuras del deporte y el entretenimiento habían sido coaccionadas para que se manifestaran en contra del gobierno, denunciando un supuesto uso de dinero para chantajear a artistas. “Aquellos que llamaron al odio contra Venezuela lo pagarán”, advirtió el mandatario.
El presidente también instó a la Asamblea Nacional a legislar en contra de lo que él denominó movimientos “fascistas”, argumentando que estos van en contra de la Constitución. Maduro comparó la situación actual de Venezuela con la Europa de 1936, sugiriendo que el país es un objetivo estratégico para las élites globales.
3eravoz @soyjosecorrea
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